5 de abril de 2009

Equidistante


me pregunto que estarás haciendo ahora


¿deshojando fulgores con los ojos del cansancio


o descifrando en los signos los temores insondables del abismo?


me estremece imaginar que estás acá conmigo


entornando los párpados y tallando estas letras


en el fragor de la noche lenta o en la tarde añeja


nunca en la mañana, no


porque el albur incansable de los días me pertenece y lo sabés


estarás repujando tus anhelos y eso sí que es entrañable


yo de este lado, vos de aquel otro


y en el medio entre nosotros un retablo de estrellas


una almacabra de soles